martes, abril 16, 2013

Twitter y el maratón de Bostón. La gestión exitosa de la comunicación de un atentado en redes sociales

No han pasado ni 24 horas del atentado terrorista acaecido durante el maratón de Bostón, cuando me siento a escribir. Y se vienen agolpando en mi mente dos conceptos: imagen y sincronía. La vida la observamos en directo en nuestros pequeños dispositivos móviles. No hay nada nuevo en relación a ser testigos del acontecer con respecto, por ejemplo, a las caída de las torres gemelas. La imagen sigue siendo el eje fundamental del relato. También la sincronía. Incluso los periodistas pueden hacer su narración a miles de kilómetros de distancia. Eso ya lo hacíamos en 2.001. Pero hay un hecho novedoso desde que llegaron las RRSS, y también la actual crisis económica. Hay una legión de profesionales de la información en búsqueda activa de empleo dispuestos a narrarnos en directo, desde sus casas, y a través de Twitter, lo que está ocurriendo con los más diversos puntos de vista. No necesitan un complejo equipamiento. Un televisor y un smartphone pueden servir para competir de tú a tú con los grandes medios de comunicación, y más aún cuando algunas televisiones deciden olvidarse de su deber y no trastocan su programación para informar. No deja de hecho de sorprender el excelente trabajo de los compañeros de @MarcaTV que dedicaron su programación al atentado haciendo una magnífica cobertura.

Los últimos ERES sufridos en la profesión han convertido el panorama periodístico en un erial. Cientos y cientos de profesionales están buscando una salida. Algunos a través de las redes sociales. Muchos intentan reinventarse y demostrar lo que valen, que no es precisamente poco. Y son capaces de hacer mejor periodismo que muchos medios de comunicación empeñados en buscar audiencia a base de publicar fotos a cada cual más morbosa, lo que suscita importantes debates.

Por sólo poner un ejemplo de los muchos que vi ayer, mi amigo Pedro Guzmán, gran reportero de sucesos,  nos traía a través de Twitter la imagen en directo de los perros policía trabajando en el lugar de la tragedia. Lo mismo que hubiera hecho en TV pero a golpe de Tweet ¡Enhorabuena Pedro! Me descubriste un canal extraordinario de información.



El poder de la imagen

Poder llevar en directo la imagen de un atentado al salón de miles de casas, con sólo una webcam, da idea del poder de internet y las redes sociales. Un pequeño dispositivo y una ADSL capaces de retransmitir la catástrofe, pese a que las comunicaciones móviles habían sido cortadas para evitar la detonación remota de explosivos. Decenas y decenas de vídeos volcados a YouTube por los testigos. Unos más duros que otros. Medios de comunicación que los iban rebotando poco después por medio mundo. Algunas fotos de dudoso gusto y que, como ya he dicho, poco aportaban. Y junto a ellas, fotos que sin duda se convertirán en auténticos iconos del terror y de la valentía frente al horror.


La eficaz gestión de la Comunicación

Desde luego que Boston no ha sido el Katrina. Información Rápida en el 1.0 y el en 2.0. Ruedas de prensa del Alcalde, el gobernador y el jefe de policía para aclarar la información en tiempos más que razonables. Y una cuenta en Twitter de referencia. La de la policía de Bostón @Boston_Police que iba ofreciendo información precisa casi de forma quirúrgica.
En tweets como estos:



Y un presidente, Barack Obama, que poco más de dos horas después comparecía en directo por TV ante sus ciudadanos en un magistral ejercicio de la comunicación política y de la gestión de las emergencias. Apoyado por fotos previas de su trabajo en el despacho oval colgadas en su cuenta de Flickr.



Bulos, rumores, VOST y el horno autolimpiable

Por supuesto la eficaz acción informativa pública no pudo evitar que los bulos y la desinformación también estuvieran presentes. Sólo hay que leer al New York Post para sentir un poco de vergüenza ajena. Hasta 12 muertos colocaba en sus titulares. No hace falta hacer muchos comentarios al respecto.

Pincha en el link y verás cómo modificaron después el titular


Pero bulos como este eran rapidamente cuestionados por la propia red que, en muchos casos, ponía en solfa las informaciones, e incluso buscaba a otros grupos de tuiteros en los que apoyarse para poder hacer frente a los rumores. La teoría del horno autolimpiable. Es el caso del especialista canadiense en comunicación de emergencias @patricecloutier que pedía ayuda para localizar algún grupo local VOST de voluntarios digitales en emergencias.


De hecho desde España la cuenta @vostSPAIN intentó echarle una mano después de que algunos hiciéramos RT a Patrice.


En ese proceso de ayuda mutua caben destacar dos iniciativas. La primera, la de la Cruz Roja americana @RedCross que activó un sistema de ayuda a los familiares de las víctimas. Herramienta a la que se enlazó desde el 112 de Madrid @112cmadrid


Y la segunda, Google que puso de nuevo en marcha su famoso GoogleFinder que utilizó, por ejemplo con éxito, en el terremoto de Japón en 2.011.


La caída de las comunicaciones móviles

Ya es un clásico en grandes catástrofes naturales o atentados terroristas. En ambos casos, ya sea por efecto del propio fenómeno natural o por la necesidad de evitar nuevos atentados, los móviles dejaron de estar operativos. Pero no así las lineas ADSL. De hecho, las TV podían conectar vía Skipe con sus nacionales desplazados al lugar. Es el ejemplo de Marca TV.


De ahí la siguiente recomendación vía Twitter


Y que recibía retweets como éste.



Concluir señalando el excelente trabajo de comunicación realizado por las autoridades norteamericanas basado en premisas esenciales en la comunicación de emergencias: información rápida, objetiva, puntual, transparente, que genere certidumbres y basada en un mensaje único. Será la manera más eficaz de luchar contra la desinformación y los rumores. Y más con el actual panorama de las redes sociales.